Voley Sanse Mepaban no puede cortar su racha negativa ante CAV Murcia 2005

El Pabellón Valvanera de San Sebastián de los Reyes acogió el choque que cerraba la 11ª jornada liguera y que medía a los conjuntos de Voley Sanse Mepaban y CAV Murcia 2005. Las visitantes estuvieron más acertadas en la recta final de las dos primeras mangas lo que a la postre pagaron las madrileñas. CAV Murcia 2005 se hizo con el partido por un indiscutible 0:3.

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Voley Sanse Mepaban se presentaba ante su afición tras el parón navideño con dos importantes novedades en su formación: Dubinina en el centro de la red y Sydorenko por zona 4. El equipo saltaba muy “enchufado” al parquet sansero y pronto las madrileñas se ponían por delante (8:6), Murcia se rehacía, sobre todo merced a su ataque y a una inspirada María Revilla, para llegar a la recta final del set con una inquietante ventaja de tres puntos (17:20) que obligaban a Zalyobovska a detener el set. La reacción no se hacía esperar y dos acciones consecutivas metían a las madrileñas en el set (19:20). En ese momento dos faltas de zaguero consecutivas de Fernández de Velasco rompían a las locales. Un ataque por zona 2 de Rivera daba el primer set a las visitantes (20:25).

La tónica del final de primer parcial se repetía en el arranque de set lo que obligaba a la entrenadora sansera a detener el set. Sanse se fue metiendo en el partido a medida que avanzaba el partido pero la calidad de la pareja Mladenovic, Rivera unido a la irregularidad en recepción madrileña impedían la reacción (14:18). Contra las cuerdas, Zalyobuvska daba entrada a Gómez y Baeza en el doble cambio por Fernández de Velasco y Marras. Sanse apretaba y con Sydorenko al saque se metía en el set (19:20). Un discutido block out murciano y un error de recepción de Palacios cortaban de raiz la reacción (19:22). Rivera, otra vez por cuatro, daba el segundo set a Murcia (20:25).

Pese al golpe de ceder los dos anteriores set en su recta final, Sanse no bajaba los brazos y llegaba al primer tiempo técnico por delante (8:7). Una discutida decisión arbitral sacaba a las madrileñas de la pista y del 13:11 posible a favor se pasaba, tras el desconcierto, en un preocupante 12:15 que parecía condenar el partido. Marras marchaba al banquillo ocupando su lugar Baeza en busca de una reacción. Reacción que no llegaba y obligaba a Zalyobovska a agotar sus tiempos.