Madrid, Cataluña y Baleares fueron las únicas comunidades aportadoras netas al sistema de financiación autonómica en 2022, contribuyendo con casi 10.000 millones de euros. El informe de Fedea destaca que estas comunidades tienen la mayor renta per cápita, mientras que otras como Murcia y Andalucía reciben menos recursos.
Según un estudio de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), en 2022, las únicas comunidades que contribuyeron netamente al sistema de financiación autonómica (SFA) fueron Madrid, Cataluña y Baleares, las cuales se destacan por tener la mayor renta per cápita.
Este lunes, Fedea ha dado a conocer un informe redactado por Ángel de la Fuente, en el cual se examina la liquidación del sistema de financiación autonómica (SFA) para el año 2022, información que ha sido divulgada recientemente por el Ministerio de Hacienda.
El informe detalla que en 2022, las comunidades con menor renta recibieron recursos adicionales que superaron sus ingresos tributarios, alcanzando aproximadamente los 24.000 millones de euros. Estos fondos provienen en parte del Estado, que contribuyó con más de 14.000 millones de euros, y en parte de las comunidades con mayores ingresos per cápita, como Madrid, Cataluña y Baleares, que sumaron cerca de 10.000 millones.
Específicamente, Madrid fue la comunidad que más contribuyó al sistema en 2022, alcanzando los 7.395 millones de euros. Le siguió Cataluña, con una aportación de 2.088 millones, y Baleares, que aportó 345 millones de euros. De este modo, estas tres comunidades, que presentan las rentas per cápita más altas, son las únicas que realizan aportaciones netas, sumando un total de 9.828 millones de euros.
De acuerdo con Fedea, aproximadamente el 7% de los ingresos tributarios autonómicos en Baleares y Cataluña proviene de las aportaciones a la nivelación, mientras que en Madrid esta cifra alcanza el 25%.
En cuanto a las comunidades que reciben estas transferencias, en diez casos, los ingresos obtenidos por este medio superan el 20% de los ingresos tributarios homogéneos. Esto es especialmente relevante en las regiones de Extremadura y Canarias, donde la cantidad recibida excede el 85% y el 100%, respectivamente, de lo recaudado por tributos cedidos.
LAS COMUNIDADES AUTÓNOMAS CON UNA FINANCIACIÓN POR DEBAJO DE LA MEDIA.
El informe que la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) ha publicado indica que, por segundo año consecutivo, las comunidades de Murcia, Valencia, Andalucía y Castilla-La Mancha se encuentran en las posiciones más bajas en cuanto a la distribución de financiación efectiva por habitante ajustado.
Específicamente, considerando que la media nacional se sitúa en 100, el índice de financiación definitiva por habitante ajustado para competencias homogéneas en Murcia fue del 90,8 en 2022. En comparación, la Comunidad Valenciana alcanzó un 91,8, Andalucía un 94,6 y Castilla-La Mancha un 94,9.
Según el estudio, en 2022 se han observado variaciones notables en las posiciones relativas de diversas comunidades autónomas respecto a la financiación efectiva por habitante ajustado. Estas diferencias han sido influenciadas de manera significativa por la evolución desigual de los ingresos tributarios en cada región.
Destaca en el año 2022 el notable progreso de Aragón y La Rioja, que incrementan sus puntuaciones en 4,8 y 3,2 puntos respectivamente. En contraste, Madrid experimenta un descenso de 2,1 puntos, situándose justo en el umbral de la media con un índice de 100.
Se anticipa que en 2025 los recursos se mantendrán estancados
En 2022, se observó un aumento de aproximadamente 18.000 millones de euros (un 14%) en el volumen total de la financiación definitiva para las comunidades autónomas de régimen común, al considerar competencias homogéneas y un esfuerzo fiscal equivalente. Este crecimiento se atribuye principalmente a la favorable evolución de los ingresos tributarios tanto autonómicos como estatales.
En lo que respecta a los años más recientes, aún no se cuentan con datos definitivos sobre financiación. Sin embargo, se observó un notable aumento en los recursos sujetos a liquidación proporcionados por el sistema durante 2023 y 2024, con tasas de crecimiento del 19,3% y 14,7% respectivamente. Para el año 2025, se anticipa que esta tendencia se estabilice, proyectando una tasa de crecimiento del 2,55%.
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