La delegada del Gobierno de Madrid, Cristina Cifuentes, ha acusado este lunes a la portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Ada Colau, de haber apoyado a Bildu, a Sortu y a otros grupos "proetarras" y de emprender una "estrategia política radical" a partir del movimiento antidesahucios.
"Ada Colau y las personas que están la plataforma anti desahucios han manifestado su apoyo, en determinadas ocasiones, a Bildu, a Sortu y a esos grupos que a mi modo de ver y el de muchos españoles tienen que ver con entorno de ETA", ha asegurado, en una entrevista en Radio Nacional recogida por Europa Press, la delegada del Gobierno, quien también ha acusado a este grupo de llevar a cabo "una estrategia política radical", aprovechando la cuestión de los desahucios.
En este sentido, Cifuentes ha considerado que la PAH no es solo un grupo que está apoyando a las personas desahuciadas, sino que también "está siguiendo una estrategia política bastante radical". "Yo sí creo que hay intereses políticos en todas estas cuestiones, sino que alguien me explique por qué de repente el acoso se centra exclusivamente en políticos del Partido Popular", ha añadido.
De esta forma, la delegada del Gobierno ha distinguido entre el "drama" de las personas que están sufriendo desahucios y a las que "el Gobierno ya está ayudando con diferentes medidas" y "violencia y coacción" que, a su juicio, lleva a cabo este grupo. "Otra cosa es la lucha callejera hasta llegar casi a la kale borroca", ha destacado.
Cifuentes insiste en que la PAH debería desvincularse de actos de apoyo al entorno de ETA y ha añadido que este colectivo no debería meterse en política, sino limitarse a ayudar a las personas que han sufrido algún desahucio.
Asimismo, la delegada ha mostrado también su rechazo a que "Bildu apoye a la PAH". "Esa comunión de ideas no es positiva. Los responsables deberían desvincularse. En este caso apoyaron una manifestación a favor de los presos de ETA", ha reiterado al ser preguntada por los medios de comunicación.
Ha definido a la PAH como un "colectivo formado por gente de procedencia diferente que trabajan para ayudar a personas desahuciadas, unas veces con medidas más acertadas y otras menos", por ello ha criticado que "entren en política". "Están para ayudar a quienes han sufrido un desahucio", ha defendido.
Preguntada acerca de la práctica conocida como "escrache" consistente en perseguir a dirigentes políticos, Cifuentes ha asegurado que "no es tolerable" y que "los diputados tienen que poder votar en libertad". Pese a todo ha mostrado su confianza en que se trate "hechos aislados" y no cree que sea necesario que la Fiscalía actúe de oficio contra sus integrantes.
UNA DIPUTADA DEL PP DENUNCIA A LA PLATAFORMA POR ACOSO
La batalla política desatada contra los integrantes de la Plataforma ha ido incluso más alla. La diputada nacional del PP por Asturias Carmen Rodríguez Maniega ha presentado una denuncia en la Comisaría de Policía de Avilés contra el acoso que asegura que está recibiendo de miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) del Principado.
La diputada avilesina ya puso en conocimiento de la Policía Nacional varios episodios de acoso de este movimiento contra los desahucios y hoy ha ratificado formalmente su denuncia por entender que no se puede pasar por alto esta situación.
Maniega ha explicado que la pasada semana fue perseguida por un grupo de activistas a la salida de una reunión de Federación Asturiana de Concejos "al grito de asesina, criminal y sinvergüenza".
Los activistas la persiguieron durante más de una hora por las calles de Oviedo hasta que tuvo que pedir ayuda a la Policía para poder entrar en un taxi, según ha explicado la parlamentaria del PP.
En otra ocasión el acoso fue en la sede del PP de Avilés a la que había acudido con uno de sus hijos.
"Cuando ya nuestros familiares se ven involucrados en este tipo de protestas tenemos que presentar la denuncia porque no podemos pasar esta situación por alto, pues nos asaltan con coacciones", ha denunciado Carmen Maniega.
Por último, Cifuentes ha expresado su deseo de que estos "ataques" no se recrudezcan y ha destacado la incompatibilidad entre el derecho a manifestarse con el ejercicio de la violencia y la coacción.