Técnicos municipales inspeccionan 38 locales de ocio en 'La Cubierta'

Técnicos municipales del Ayuntamiento de Leganés han inspeccionado un total de 38 establecimientos hosteleros del entorno de la plaza de toros 'La Cubierta' para levantar actas de posibles infracciones en materia de sanidad e industria.

De esta manera, los técnicos han comenzado las inspecciones a las 9 horas de esta mañana, una iniciativa que, según fuentes municipales, responde "a motivos de seguridad y en cumplimiento de la normativa de industria y sanidad".

Para ello, el Ayuntamiento notificó las inspecciones a los propietarios para que, durante este jueves, abriesen los negocios con el fin de facilitar las labores de inspección. Según han informado las mismas fuentes, once de los locales no han podido ser inspeccionados por "incomparecencia" de sus propietarios.

La revisión del estado y condiciones de los locales --entre ellos, discotecas, bares de copas y locales de hostelería-- ha sido efectuada por ingenieros industriales e inspectores sanitarios del Consistorio, quienes, posteriormente, han procedido a reflejar en los pertinentes informes el estado de los locales en ambas materias y las deficiencias a subsanar, si las hubiera.

Las mismas fuentes han informado de que, tras la visita, se elaborarán las correspondientes actas de inspección y, en el más breve plazo de tiempo posible, se remitirán a los propietarios los informes con las deficiencias a subsanar o las mejoras a realizar en los locales para adecuarse a la normativa de Industrias y de Sanidad, así como el tiempo del que dispondrán para llevarlas a cabo. "En algún caso se podría decretar la clausura si el estado del local no permitiera la continuación de la actividad", ha informado el Ayuntamiento.

La Cubierta es una de las zonas de ocio nocturno de Leganés los fines de semana, y acumula numerosas incidencias y altercados desde hace años. En 2009, los grupos políticos acordaron la constitución de una comisión de investigación sobre este entorno, entidad que emitió un dictamen en el que se reconocía la existencia de "errores" y una escasa coordinación entre las concejalías de Industria y de Seguridad Ciudadana, sobre todo, en lo referente a la concesión de licencias y en el seguimiento de los expedientes sancionadores que, tras las denuncias policiales por incumplimientos, se remitieron a la Comunidad de Madrid.