Semana del 14 al 20 de junio de 2011

14/06/2011.- VALERIANO Y LOS BANCOS
El gobierno ha variado su discurso, y conviene tomar nota de la nueva deriva demagógica, de un estilo cercano a los que en la calle se dicen indignados y piden cabezas de banquero, como en la Francia de la revolución. En unos meses hemos pasado de tener el mejor sistema financiero de Europa a culpar a los jefes de la banca de los cinco millones de parados. El caso es exculpar al ejecutivo, librarle de la pesada carga de la situación social, y señalar a los que ejecutan las hipotecas de los morosos. Valeriano, al que se le ven las costuras de sindicalista debajo del traje de ministro, juega con fuego. En lugar de hacer un poco de pedagogía económica, señala a los ricos. Esta nueva orientación ideológica del ejecutivo parece dictada por Rubalcaba, que en su estrategia para movilizar el voto de la izquierda parece necesitado de chivos expiatorios que entregar en el altar de los sacrificios que exige la calle. Valeriano demuestra impotencia y resentimiento cuando culpa a los bancos del paro. O es un ignorante o es un malicioso. Cualquiera de los dos extremos de la alternativa resulta peligroso.

15/06/2011.- GALLARDÓN Y LOS TRASNOCHADORES
La cuestión más repetida en los medios ha sido el acoso al alcalde, a su familia, y a su perro. Incluyo al can, porque estamos en una época en la que se habla mucho de los derechos de los animales, y de la necesidad de evitar su maltrato. La protesta en el domicilio de Gallardón se ha visto como una deriva violenta y alborotadora del movimiento del 15-M, como si los de Sol hubieran degenerado en protagonistas de un motín a favor de los conciertos en Chueca. Hemos llegado a un estado de descomposición tan relevante, que cualquier pretexto banal sirve para montar un pollo. Esto es muy español, lo es el 15-M y el 16-M y si me apuran también el 20-J. Con lo de la Puerta del Sol y la actitud del ministerio del Interior de no mandar a la policía para evitar males mayores, a cualquier grupo o colectivo se le anima a llevar sus quejas hasta la cama del alcalde o gobernante. Eso sí, a nadie se le ha ocurrido todavía acudir a la Moncloa o a los ayuntamientos de Bildu. Las protestas, dicen el manual progresista, se deben hacer siempre contra la derecha. El resto de la humanidad es inocente.

16/06/2011.- ESPE TOMA POSESIÓN
El nuevo gobierno de Aguirre fue anunciado en Twitter, la red del “pío, pío”, que no otra cosa es el tuitear. El nuevo ejecutivo es una versión jibarizada del que ya conocíamos, con algunos cambios. Los consejeros caben en un ascensor, como demostró la presidenta cuando les hizo bajar a todos en la caja del montacargas. Eso es un signo de austeridad. Lo más notable de los cambios es la llegada de Percival Manglano a la consejería de economía. Tiene nombre de caballero artúrico y aires de joven sobradamente preparado. Quizá lo que llama la atención es la formación de una nueva generación de políticos en el gobierno de la comunidad, liderados por Lucía Figar, estrella ascendente, proyectada como sucesora, y que asume nuevas competencias en empleo. Figar acumula en sus manos las dos grandes prioridades de este mandato: la educación y la creación de puestos de trabajo. Esperanza mantiene a su escudero más eficaz: Ignacio González. Y se desprende de Granados, que no quiso ser portavoz en la cámara, y al que ahora habrá que colocar, no se sabe dónde, no se sabe por qué, en algún rincón. De momento tiene sitio en Génova, como segundo del partido en Madrid. ¿Hasta cuándo?

17/06/2011.- LETIZIA Y LOS ARISTÓCRATAS
Nunca se ha llevado bien con la nobleza, con ese grupo de aristócratas que tiñe su sangre de azul para demostrar un origen exclusivo. A decir verdad, nunca la tragaron. Consideran que el príncipe se equivocó, como la paloma de Alberti. Acatan el matrimonio pero no comparten la idea. Creen que el Rey fue demasiado transigente, y que la boda fue el resultado de un órdago. Estos días vuelven a estar activos, nerviosos, excitados. ¿Por qué? No es por el verano, sino porque han escuchado algunas quejas. Hay personas relevantes, que han tenido que ver con la formación del príncipe, y que han ayudado a la transición de Letizia de periodista a princesa, que se quejan. Han sido excluidos, apartados, y cuando el Rey ha regalado los últimos títulos nobiliarios, han sido postergados, relegados, dejados a un lado. Las quejas en voz baja contra el príncipe y contra la princesa han arreciado. La pareja no cuenta con personas que les han ayudado en momentos clave de su vida. Entre los agraviados está una especialista en la historia de España, y algún alto funcionario que tuvo responsabilidad en situaciones delicadas. Los nobles, los de verdad, les han dicho aquello de “bienvenidos al club de los molestos”.

18/06/2011.- PAZ VEGA ENTRE LOS INDIGNADOS
Han levantado el campamento de Sol, pero Paz Vega sigue ahí, encaramada en lo alto de un andamio, tumbada como una sirena varada, anunciando alguna crema cosmética. A Paz la colocaron como mujer anuncio antes de que comenzara la acampada. Ahora nos cuentan que la marca que la contrató para ser su musa y animar el comercio de sus productos, quiso quitar el cartel en cuanto empezó la algarada de los indignados. A los cosméticos franceses les parecía que la vecindad del campamento restaba glamour y fascinación a su musa. Paz Vega entre las fieras. Conforme pasaban los días, lo de la casa de cremas y perfumes se ponían más nerviosos. Las noticias sobre pulgas, chinches, y algunas ratas en el kilómetro cero les llevaron al ataque de dignidad. La imagen de su chica entre los parias del capitalismo era una contradicción insoportable. Pidieron unas horas de tregua para levantar el cartel, y llevarse a Paz Vega a otros barrios, más limpios, menos televisivos. Pero los responsables del ayuntamiento les dijeron que no, que la chica y el cartel debían quedarse donde estaban, y que la operación de levantar a Paz no se podía llevar a cabo por seguridad.

19/06/2011.- MONAGO PRESIDENTE
Se rompe la tradición, y el Psoe sale del gobierno extremeño. Monago será presidente. A Cayo Lara los suyos no le han hecho ni caso. No sirvió de nada que Cayo viajara hasta Extremadura a intentar poner orden y propiciar el voto hacia el Psoe. El resentimiento de los comunistas contra Vara y contra todo el Partido Socialista tiene mucha historia: es un odio viejo, enquistado, alimentado por muchos desprecios y desplantes. Así que Monago será presidente, el primero de derechas que tiene la comunidad desde que es autonomía. Al poder socialista ya no le quedan ni los palos del sombrajo, y a sus vecinos andaluces este relevo les ha producido un miedo hondo, un canguelo interminable, y un rumor de miles de puestos que peligran si la cosa se contagia al gobierno de Sevilla. Ha ocurrido en el Psoe lo que más temían los barones: que la situación económica y la persistencia de Zapatero en la Moncloa, tumbara aquellos gobiernos que han sido el refugio, la casa, el corazón del socialismo español. Gobiernos que pasara lo que pasase siempre estaban en las mismas manos, producto de una fidelidad electoral incombustible. Cuando ZP deje el gobierno pasará a la historia como el presidente que asoló la casa socialista, hasta la médula.

20/06/2011.- LA CAIXA SALE DE ESPAÑA
Hubo unos años en los que se practicó la expansión de la gran empresa española hacia el exterior. Se hizo sobre la base del crecimiento interior. El Santander, BBVA, o Telefónica, salieron para exportar un modelo de empresa, una forma de hacer las cosas, una visión de los negocios, y unos equipos a los que España se les quedaba pequeña. Ahora el mercado interior es un tanto por ciento muy pequeño en los resultados de esas compañías. Y en la pobreza, otros se ven obligados a hacer las maletas y a mandar a los suyos a Europa, o a América. Isidro Fainé, presidente de La Caixa, ha anunciado que saldrán a la emigración, en busca de nuevos mercados. España es hoy mucho más pequeña que cuando sus competidores decidieron diversificar sus mercados. Gracias a aquella expansión, hoy pueden exhibir beneficios resistentes a la crisis. Fainé sabe que si se queda solo en casa terminará disminuyendo de tamaño, como la España menguante de ZP.