Jueves 02 de octubre de 2014
La victoria del Atlético en Huelva después del nefasto mes de enero protagonizado por los rojiblancos y especialmente la brillante actuación de Aguero y Forlán, han venido a aumentar las dudas de buena parte de su afición sobre el papel que ha jugado la plantilla colchonera en el cese del anterior técnico, Javier Aguirre. Casualidad o no, lo cierto es que en el debut de Abel Resino en el banquillo se volvió a la senda de las victorias, aunque creo que aún es pronto para lanzar las campanas al vuelo.
Es cierto que el equipo se mostró más compacto y que trabajó mucho pero aparte de los puntos y de la recuperación de sus dos delanteros (un aspecto fundamental) pocos motivos más encuentro para el optimismo. El rival le creo tantas o más ocasiones de gol que en partidos precedentes y mantuvo la posesión del balón más que los atléticos. Abel apostó por Assunçao y Raúl García en el centro del campo, como hizo Aguirre en varias ocasiones, y el resultado fue el mismo.Escasa creación de juego y practicamente ninguna ayuda a los del ataque. Dudo mucho que jugando en casa y ante un rival más cerrado que los onubenses, pueda alinear a esa pareja más Antonio López en el interior izquierdo.
Para mí que Abel ha intentado apostar de inicio por la gente más comprometida, mandando un mensaje a los jugadores de que no le va a temblar el pulso si tiene que dejar en el banquillo a gente como Maniche. Otra cosa es saber que actitud adoptará el portugués si se mantiene en la suplencia. Ante el Getafe, volverá Maxi y seguramente Simao y empezaremos a ver realmente que opciones elige el técnico. El triunfo en el Colombino ha sido un buen primer paso y si los dos de arriba siguen enchufados todo será más fácil, pero Abel tiene aún muchas incógnitas que resolver.
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