• El Ayuntamiento de Madrid designa a Joan Gaspart como representante en La Caixa
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha dicho hoy que "no parece lógico" que el 70 por ciento de la representación de los Ayuntamientos en los órganos de gobierno de Caja Madrid recaiga "sobre uno sólo", en referencia al Consistorio gobernado por Alberto Ruiz-Gallardón.
Aguirre realizó estas declaraciones tras una reunión con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, donde ha recordado que todas las Comunidades que han hecho leyes autonómicas sobre sus cajas "han puesto un limite máximo a la representación de los Ayuntamientos".
Además, la presidenta regional ha explicado que para que un consejero pueda optar a un mandato excepcional cuando agote los doce años de límite máximo, "es necesario ser reelegido por la misma representación que ostenta".
Por último, Aguirre ha recalcado que en las enmiendas, que "ha introducido el grupo parlamentario popular, no el gobierno regional", se pretende "disminuir el peso del sector público en la caja y dar entrada a la sociedad civil para que no sean sólo los sindicatos, la Asamblea, los Ayuntamientos y el Consejo Económico y Social los que estén presentes".
Por su parte, el 'vicealcalde' de Madrid, Manuel Cobo, ha denunciado la "discriminación" que a juicio del Ayuntamiento supone la iniciativa del PP en la Asamblea de reducir a un 30 por ciento como máximo en la Ley de Cajas de la Comunidad la representatividad del municipio en el Consejo de Administración de Caja Madrid.
Para Cobo, se trata de una "discriminación hacia los madrileños, las mujeres y hombres que viven en la ciudad de Madrid" porque "cualquiera de las ratios, fundamentalmente la de la población, que sería el mínimo que se podría establecer como proporcional, es muy superior a esa cifra".
"Madrid tiene un 50 por ciento de la población de esta Comunidad y de los depósitos de aquellas personas que tienen su dinero en la Caja en lugar de llevarlo a otros bancos y eso se tiene que tener en cuenta a la hora de designar los representantes dentro de los ayuntamientos", ha argumentado el 'vicealcalde'.
Cobo ha manifestado que su afirmación es "objetiva" y "no tiene otra carga política" y ha dicho esperar "que sea explicado y muy bien" por parte de los promotores de la iniciativa, "porque los madrileños, los que viven en esta ciudad, no lo van a entender".
La portavoz del grupo de IU en la Asamblea de Madrid, Inés Sabanés, ha destacado que tras las enmiendas del grupo popular a la Ley de Acompañamiento referidas a la modificación de la Ley de Cajas, hay "una intervención en el proceso electoral de Caja Madrid y un paso más en la batalla de Esperanza Aguirre por hacerse con el control de esta entidad".
"Ha sido una actuación premeditada, dirigida personalmente por Aguirre y absolutamente irresponsable", ha criticado Sabanés.
El portavoz de IU en la Comisión de Economía y Hacienda de la Asamblea de Madrid, Miguel Reneses, ha dicho que las enmiendas "ponen de manifiesto el abuso de la Ley de Acompañamiento, ya que no es posible que el futuro de Caja Madrid se legisle casi sin debate y de forma poco transparente".
En esta línea, el sindicato CCOO de Madrid ha rechazado que el Gobierno de Esperanza Aguirre "utilice la Ley de Acompañamiento de los presupuestos regionales para modificar la Ley de Cajas de la Comunidad de Madrid ya que se requiere una ley específica".
"Esta modificación se ha planteado de modo prepotente y unilateral y hay que contar con los que se encuentran representados en los órganos de gobierno de las cajas de ahorros para llegar a un amplio consenso", ha destacado el secretario de Política Institucional de CCOO, Jaime Cedrún, quien ha reclamado al Gobierno regional que no ponga "en riesgo" la segunda caja de España en momentos de crisis financiera.
Recordemos que la Comunidad de Madrid ha restado poder al Ayuntamiento en la representación que éste tiene en los órganos de gobierno de Caja Madrid, que pasará del actual 70 por ciento a un 30 y dejará en manos de la Asamblea de Madrid la reelección del presidente de la entidad, Miguel Blesa.
Así, se ha cambiado el sistema de cupos mínimos por un límite del 30 por ciento de los consejeros del sector por corporación, una medida que "beneficia a los Ayuntamientos, tanto a los pequeños como a los grandes", según ha explicado el portavoz del PP en la Asamblea de Madrid, David Pérez, después de presentar las enmiendas de su grupo al proyecto de ley de Medidas Fiscales y Administrativas.
El antiguo sistema de cupos, ha dicho Pérez, "quiebra el principio de proporcionalidad que establece el sistema constitucional" y suponen "un privilegio injustificado" que no existe en otras comunidades autónomas.
El PP propone que la elección de los consejeros generales de este sector lo sea en función del peso real de los grupos políticos de las Corporaciones Municipales, "de acuerdo con la voluntad popular".
El cupo del 30 por ciento, ha añadido, ya existe en otras Comunidades Autónomas como Andalucía (25 por ciento), Castilla y León (20 por ciento), Cataluña (20 por ciento) o La Rioja (30 por ciento).
Para la designación de los consejeros generales del sector de corporaciones municipales se han creado dos circunscripciones electorales comprensivas, la primera de la Comunidad de Madrid, y la segunda del resto de Comunidades Autónomas y ciudades con estatuto de autonomía donde las cajas de ahorro tengan oficina abierta.
Además, se añade una cláusula que impedirá a cualquier consejero que lleve doce años en su cargo volver a presentarse como candidato, excepto que lo proponga el mismo sector por el que fue elegido.
El presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, lleva doce años en su cargo y fue elegido por la Asamblea de Madrid, por lo que la ampliación de su mandato dependerá de este órgano.
Pérez ha explicado que el objetivo de las enmiendas presentadas por su grupo es potenciar la sociedad civil en detrimento del sector público y para ello se da entrada a universidades privadas, a organizaciones empresariales, sindicatos y a la Cámara de Comercio.
Por otra parte, la corporación financiera que Caja Madrid quiere sacar a bolsa, Cibeles, celebró hoy su junta general de accionistas en la que se eligieron los 18 miembros de su Consejo de Administración, que dirigirá el presidente de la caja, Miguel Blesa, y tendrá como consejero delegado a Carlos María Martínez.
Dicho órgano está integrado por un secretario y 15 consejeros (8 de ellos actualmente vinculados a la caja) además de por Blesa y Martínez, quien hasta el verano ocupó el cargo de director gerente de la obra social y fue propuesto tras la renuncia de Carlos Vela a ocuparse de Cibeles tras su polémico paso por la inmobiliaria Martinsa-Fadesa.
En cuanto a los ocho consejeros de Cibeles actualmente relacionados con la caja estarán los dos vicepresidentes de la entidad, José Antonio Moral Santín y Estanislao Rodríguez-Ponga.
También formarán parte del órgano cuatro vocales del consejo de administración de la caja: Francisco Baquero, quien ocupa dicho cargo desde julio de 2006 en representación de CCOO; Mercedes de la Merced, consejera del PP desde julio de 1997; Antonio Romero, el que fuera vicesecretario general del Partido Socialista de Madrid; y Mercedes Rojo, asesora de presidencia de la Comunidad de Madrid.
Además, el nuevo órgano de la corporación financiera contará con dos directores generales de Caja Madrid, Matías Amat (del área de negocio) e Ildefonso Sánchez Barcoj (director financiero y de medios).
En el grupo de personalidades de reconocido prestigio están, entre otros, Ángel Acebes, ex ministro de Interior y ex secretario general del PP; Carmen Cavero, directora de desarrollo de negocio de Morgan Stanley; Óscar Fanjul, ex presidente de Repsol y vicepresidente del Consejo de Administración de Lafarge; y Manuel Lamela, ex consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid.
Asimismo, formarán parte del consejo de Cibeles el presidente de la aseguradora Mapfre, José Manuel Martínez; Pedro Schwartz, miembro del consejo asesor de Capgemini España; y el ex director del Departamento de Análisis del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, Ignacio Varela Díaz.
Por otro lado, el equipo directivo de Cibeles estará formado por seis miembros, todos ellos "con una amplia experiencia" en el sector financiero, ya que han ocupado puestos relevantes en Caja Madrid o en alguna empresa cotizada en el Ibex-35.
Así, el director financiero será Luis Gabarda, que se incorporó en 1998 a Caja Madrid; el director de recursos será Indalecio Gil, en la entidad desde 1982; mientras que otro vocal del consejo de la caja, Ignacio Navasqüés, será el secretario del consejo y secretario corporativo.
Dentro del equipo directivo de Cibeles estará también como director de auditoría, Juan Carlos Platero, quien realiza labores similares para Caja Madrid desde hace más de una década; como responsable de desarrollo estratégico estará Rafael Sánchez-Lozano, vinculado también a la segunda caja española en los últimos 10 años.
Por último, se confirmó como director de relaciones con los inversores y comunicación institucional a Jorge Segrelles, que antes de incorporarse a Cibeles era director gerente de la Fundación Repsol YPF.
Cibeles integra compañías de servicios financieros y gestión de activos propiedad al 100% de Caja Madrid, como Altae, Gesmadrid, Caja Madrid Pensiones y Caja Madrid Bolsa, y además, participa en otras compañías como Banco de Servicios Financieros Caja Madrid-Mapfre (51%), Mapfre-Caja Madrid Vida (49%) e Inversis Banco (38,5%).
También incluye la alianza que Caja Madrid estableció con Mapfre y sus correspondientes participaciones: Mapfre SA (15%), Mapfre Internacional (12,5) y Mapfre América (10,35%).
Tras la compra por parte de Caja Madrid del City National Bank of Florida, la entidad se decantó por crear una corporación financiera, de la que en principio colocaría un 30% entre inversores antes de que terminara 2008, lo que finalmente se aplazó por la inestabilidad de los mercados.