En esas instantáneas se recoge a Iglesias, que abandonó sus cargos políticos tras conocerse los resultados electorales del pasado 4 de mayo, con su nueva estética, ya sin melena y leyendo un libro junto a un subrayador.
Desde sus inicios en política Iglesias ha lucido siempre pelo largo, primero durante muchos años con una coleta que se hizo simbólica y, ya en los últimos tiempos, con un moño para recogerse la melena. De hecho, llegó a explicar en redes sociales en agosto que lo hizo por el calor y evitar que sus hijos le tiraran del pelo.
Para esta nueva etapa, el hasta ahora líder de Podemos ha optado por dejar de lucir uno de sus rasgos más característicos cuando estaba en la primera línea política.