Semana del 13 al 19 de julio de 2010

13/07/2010.- ENVIDIA DE CARBONERO

Me escribe una amiga gallega. Lo de escribir es un decir. Antes esta frase significaría que ha cogido papel y pluma. Ahora lo dejamos en que ha usado el servicio de correo de un portal de internet. Me escribe y me dice que envidia a Sara Carbonero: “Lo tiene todo”, concluye, sin especificar qué hay en ese “todo” que no lo tengan las demás. Intuyo que a mi amiga le gustan los porteros, que sería feliz si el presidente de la Asociación de Periodistas se mete con ella, y estaría encantada de tener un jefe como Paolo Vasile, que reconoce que lo de dar los partidos del Mundial no ha sido una operación económicamente rentable: “estas cosas o las tienes tu o las tiene la competencia, y es mejor tenerlas en casa para evitar el daño que te pueden hacer desde fuera”. Eso se llama pragmatismo. Que nadie vea en Tele5 un arrebato de amor patriótico, un querer a la selección y a los aficionados por encima de todo. No. Vasile creció a la sombra de Berlusconi. Cuando “il cavaliere” montó su primer partido lo llamó Forza Italia, que es el grito de guerra de los seguidores de la “nacional italiana”. Un día le preguntaron a Silvio que iba a hacer con los banderines, las chapas, y las bufandas de su partido si no ganaba las elecciones: “lo venderé todo en los estadios de fútbol cuando juegue la selección”. NO sé si mi amiga gallega envidia ese sentido de la oportunidad. Me temo que a ella lo único que le pone es un beso de tornillo ante quince millones de españoles.

14/07/2010.- RAJOY GANA

Lo dicen esas encuestas tan extrañas que se publican horas después del “Debate del Estado de la Nación”. Estoy de acuerdo con Fidalgo: estos debates no le importan a nadie. La prueba está en que la mayoría se los toma como un duelo pugilístico en el que quieren ver sangre, y dientes rotos que caen sobre las primeras filas del público. Cuando estallan las mandíbulas el respetable se pone en pie. No esperan nada más de nuestra clase dirigente. El debate nos dejó un duelo personal a cara de perro entre Zapatero y Rajoy, y la inquietante promesa del presidente del gobierno de hacer una circunvalación para sortear la sentencia del Tribunal Constitucional y desarrollar por la vía de las leyes de rango menor aquellos artículos bloqueados en la magistratura. Creo que el debate ha sido un test de estrés, como esos que les hacen ahora a los bancos, y que el menos estresado es Rajoy, quizá porque se toma las cosas con cierta pachorra, con mucha distancia. El gallego es corredor de fondo, y ha demostrado que sabe esperar y confiar en el desgaste del adversario más que en la genialidad propia. Por lo demás, las dos sesiones del debate nos han dejado la amarga certeza de que ni debemos ni podemos esperar nada bueno de los que se reúnen en el Parlamento, enredados en debates estériles, enfangados en un estilo cainita, cuando lo que aquí se requiere es un equipo articulado con ideas y valentía para aplicarlas.

15/07/2010.- FIDEL REAPARECE

Le hemos vuelto a ver en los telediarios. La momia de Fidel es el tótem de una Cuba incorrupta por la libertad del mundo capitalista, una reliquia de aquellos viejos sueños de la sierra, los barbudos, y la revolución, que han terminado en la pesadilla de una isla donde todos son presos comunes. Fidel suelta lastre, como cuando mandó a Estados Unidos a los de Mariel: gentes que marchaban al exilio, entre los que embutió muchos presos comunes a los que el régimen no podía alimentar. De momento han llegado a España siete. Ya tienen problemas. Al gobierno le gustaría que vivieran lejos de Madrid, para ponerle sordina a su testimonio. Vendrán más porque en Cuba no hay lugar para los disidentes salvo esas cárceles donde se les administra un castigo que consiste en dosis brutales de hambruna e insalubridad. La falta de libertad de la prisión es la misma que existe en la calle. La ley de Castro ha hecho que cualquier cubano que quiera sobrevivir se tenga que dedicar a algo ilegal: desde el taxi clandestino a la prostitución masiva. Y para evitar la fuga masiva vuelven a sacar a la momia, para recordar a los cubanos que si se ponen estrechos las cosas todavía pueden ir a peor. De aquella disyuntiva de “revolución o muerte”, lo único vigente es el segundo de los términos.

16/07/2010.- GRIÑÁN TIEMBLA

Le han quitado la Caja de la Iglesia. Cajasur, una de las perlas quebradas de nuestro sistema de Cajas de Ahorro, pasa a manos de la BBK, la gran caja vasca. El peso demográfico y electoral de una región decisiva como Andalucía no ha servido para evitar lo que el presidente andaluz quería evitar. Consiguió frenar las ansias de expansión de los murcianos, pero no ha podido cortar el paso a los del Norte. Hay quien ve en esta operación un cariño del gobierno y del Banco de España a un PNV que será más necesario que nunca para sacar adelante los presupuestos del 2011, y que sabe del valor de sus pocos votos en un momento de crisis política profunda. Pero lo cierto es que algunas cajas, de la misma forma que algunos territorios, han hecho sus deberes con notable: han gestionado bien sus entidades bancarias, han administrado bien sus presupuestos, y se han preocupado de apuntalar su crecimiento económico sobre bases sólidas, sin depender de la subvención o de los dineros europeos. A Griñán, a Pepe, que es como le gusta que le llamen en los telediarios, le ha tocado pagar el pato de décadas de economía intervenida y subvencionada, que la crisis ha llevado a un final precipitado.

17/07/2010.- REQUIEM POR BELMONDO

Cuando las viejas leyendas ingresan en el geriátrico, es que tu mundo ha entrado en decadencia. Cuando los mitos caen manos de cuarentonas desaprensivas es que la vitalidad de la generación que nos sirvió de modelo ha sido triturada, laminada, despreciada hasta la humillación. Cuando yo y los míos vestíamos pantalones cortos, Francia era la cumbre inalcanzable. Sus ciclistas ganaban el Tour, sus actores desmayaban a las mujeres. Alain Delon era una aspiración colectiva, Belmondo un amante envidiado: todos queríamos tener esa cara hecha a guantazos que volvía locas a las mujeres, con sus ángulos bronceados y esa caída de ojos tan hábilmente calculada. Hoy, cuando las noticias nos dicen que Belmondo se ha convertido en un anciano al que una desaprensiva le saca la pasta a puñados, pedimos justicia, o quizá venganza, a pesar de tener la certeza de que ni una ni otra están al alcance de aquellos que hicieron carnal “la grandeur” de De Gaulle. Sarkozy es un subproducto de aquella generación. Como ellos, está en manos de un garo que ronronea en sus rodillas. Pero a diferencia de Belmondo, él ha conseguido vivir de las contribuciones femeninas a su campaña electoral.

18/07/2010.- EL DÍA DE MANDELA

Guardo en mi retina el día que salió de la prisión de Robben Island el 11 de febrero de 1990. Era fin de semana y me tocó dar la noticia en Radio Nacional de España. La aparición de Mandela se hizo esperar varias horas. Las televisiones internacionales mantenían un plano fijo en la entrada del penal en el que había pasado 44 largos años. La ONU ha hecho algo inteligente, y ha decidido celebrar el día del cumpleaños del líder surafricano, y llamar al 18 de julio el Día de Nelson Mandela. En el mundo no hay muchas biografías ejemplares que sirvan como modelo y la de Mandela puede ocupar un lugar de honor en el santoral laico. Encarna los valores de la compasión, la reconciliación, y el espíritu de concordia. Basta comparar Suráfrica con Zimbabwe para saber los beneficios que esos valores difunden en la población, y las desgracias que acarrea el resentimiento, el rencor y el espíritu de venganza.

19/07/2010.- EL BESO DE PEDROSA

Repaso las imágenes del fin de semana. Hay días que me siento como esos replicantes de Blade Runner que son enviados a la Tierra con una pistola y un fajo de fotos en las que se contiene toda su vida pasada, como un equipamiento mínimo para que la memoria descanse tranquila por las noches, sin darle vueltas a eso de “de dónde venimos, y adónde vamos”. Y del fin de semana me quedo con la imagen de Dani Pedrosa, vencedor en las motos del Gran Premio de Alemania. Dani es chico listo. Gana y pide una camiseta de la selección española, esa misma que no quiso vestir Lorenzo en Montmeló “porque le podía traer problemas”. Dani se pone la roja (y amarilla) y besa el escudo. A eso se llama dar una bofetada sin que te duela la mano. Pedrosa, ese piloto minucioso y racional, dejó en ridículo a Lorenzo.