CAPITAL

Descienden las irregularidades en material escolar en la capital

Han pasado del 1,2% en 2009 al 0,6% en 2010

Jueves 02 de octubre de 2014
El Área de Gobierno de Economía, Empleo y Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Madrid ha concluido la 'Campaña de Inspección y Control de Material Escolar 2010', que se ha desarrollado durante los meses de julio y agosto.

Según el Ayuntamiento, el balance es positivo ya que se ha registrado un notorio descenso de las irregularidades detectadas en los artículos de material escolar, situándose en un 0,6 por ciento frente al 1,2 por ciento del año 2009.

El objetivo de la campaña es la protección de la seguridad de los escolares controlando los artículos que se van a utilizar durante el curso, comprobando la existencia de todos los datos obligatorios y necesarios en el etiquetado.

Por otra parte, se ha verificado el respeto a los derechos de los consumidores a través de la inspección en los establecimientos comerciales de venta minorista que comercializan estos productos.

En la realización de la Campaña han participado siete inspectores técnicos de Calidad y Consumo del Instituto Municipal de Consumo que han inspeccionado 101 establecimientos y comprobado 639 artículos escolares, entre los que se encuentran: lápices, bolígrafos, rotuladores, carteras, mochilas, estuches, pinturas de diversas clases, pegamentos, grapadoras, borradores, sacapuntas, uniformes escolares, etcétera.

El número de actas de inspección levantadas ha sido de 10 frente a las 18 de la campaña anterior, lo que supone un porcentaje de irregularidades del 9,9 por ciento. En las actas se recogen todas las infracciones detectadas tanto en materia de consumo general de establecimientos como en productos de material escolar.

Las principales deficiencias detectadas en esta campaña respecto a los requisitos que la normativa de Consumo impone a los establecimientos de venta de artículos al por menor han sido las siguientes: en el 5,4 por ciento de los establecimientos inspeccionados la publicidad y las cláusulas que exhibían inducían a error al consumidor y no respetaban sus derechos; el 3 por ciento no tenía a disposición de los consumidores hojas de reclamaciones; otro 3 por ciento no anunciaban las hojas de reclamaciones; el 2 por ciento mostraba irregularidades en el justificante de compra y el 1 por ciento tenían cláusulas abusivas en ese tique.

Por otro lado, el 99,4 por ciento de los productos comprobados no presentaban ninguna deficiencia y el 0,6 por ciento de infracciones que se han registrado afectaban a cuatro artículos que, por su apariencia engañosa, podían inducir a error al niño y provocarle algún problema de salud.

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