ALCORCÓN

El hijo del anciano acusado de asfixiar a su mujer espera que "le caigan 10 o 15 años"

Un jurado popular de la Audiencia Provincial de Madrid comenzó a juzgar a Carlos Domínguez

Jueves 02 de octubre de 2014
Un jurado popular de la Audiencia Provincial de Madrid comenzó hoy a juzgar a Carlos Domínguez, un anciano acusado de asfixiar hasta la muerte a su mujer en noviembre de 2008.

En declaraciones a Europa Press, el hijo mayor de la pareja, Mario Domínguez Martín, explicó que solo espera que la Justicia haga su trabajo y que "le caiga lo que le tenga que caer". "Si le caen 10 o 15 años, bien caídos están. No le perdono lo que hizo", aseguró Mario.

El hijo del acusado acudió a la audiencia acompañado por otro de sus hermanos y aseguró que su padre había preparado el asesinato con antelación, ya que un mes antes del trágico suceso "pasó todo el dinero de una cuenta conjunta de la pareja a una particular para él".

Domínguez sólo ha visto a su padre en una ocasión desde que se produjeron los hechos, cuando le llevó algo de ropa al penal. "Aunque es mi padre no tengo ningún sentimiento hacia él, valoraba mucho más a mi madre y la quería muchos más", confirmó.

Ahora se está intentando esclarecer si la muerte de la mujer fue un homicidio o un asesinato, porque hay una diferencia al establecer la condena. "Los expertos creen que estaba en pleno conocimiento de lo que hacía", sentenció.

El padre está acusado de asfixiar hasta la muerte a su mujer, cuyo cadáver fue encontrado por uno de sus hijos en el domicilio familiar situado en la calle Retablo de Alcorcón.

La Fiscalía de Madrid solicita 14 años de prisión para Carlos D.M. por un delito de homicidio del 138 del Código Penal, con pena de 10 a 15 años de cárcel. En concepto de responsabilidad civil, deberá indemnizar a sus tres hijos con 68.926 euros.

En el escrito de acusación el fiscal relata que en la madrugada del 4 de noviembre de 2008, el acusado golpeó a Hortensia M.P. con la intención de acabar con su vida.

"La agarró fuertemente por el cuello, presionándole del mismo para impedirle respirar y le introdujo por la boca objetos hasta causarle la muerte por asfixia", recoge el escrito.

El fallecimiento se produjo por parada cardiorrespiratoria por asfixia producida por mecanismo de compresión extrínseca del cuello y por sofocación mediante la introducción de objetos en la faringe con presión y aplastamiento de los mismos hacia la laringe.

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