El Ayuntamiento reducirá un 15% la recogida de basuras pero no ahorrará con la medida porque también recortará la Tasa
Ana Botella comienza a negociar los cambios en los contratos de Medio Ambiente y deberá tenerlos listos el 15 de julio
jueves 02 de octubre de 2014, 12:47h
El Ayuntamiento de Madrid reducirá en un 15 por ciento la recogida de basuras en la capital, que hasta ahora ofrecía servicio todos los días del año excepto Nochebuena y Nochevieja, dentro del paquete de medidas anunciadas para recortar gastos, si bien esta decisión no supondrá ningún ahorro para las arcas municipales ya que la Tasa de Basuras que paga cada vecino se verá disminuida en el mismo porcentaje.
La delegada de Medio Ambiente, Ana Botella, explicó hoy que "el 15 por ciento de recortes de contratos anunciado tendrá su reflejo en los servicios del área de Medio Ambiente, cuyos principales contratos son los de basuras, limpieza y zonas verdes".
En principio, y a falta de desarrollar las negociaciones con FCC --adjudicataria de la recogida de basuras--, la idea del Consistorio es dejar de recoger los contenedores los domingos y festivos, que son los días que estadísticamente menos residuos se depositan.
"Como no hay comercio, esos días son los que menos se recoge. Además, posiblemente mucha gente ni siquiera sabe que se recoge también los domingos", justificó la concejala.
Sin embargo, esta reducción del coste del servicio no se reflejará en un mayor ahorro para el Consistorio, ya que la recogida de basuras se financia prácticamente en su totalidad mediante la Tasa de Basuras puesta en marcha el año pasado.
"La reducción de lo que cada madrileño paga de Tasa de Basuras será exactamente en el mismo porcentaje en términos absolutos que el coste de la recogida y tratamiento de la basura. No ahorraremos en esto, pero sí se disminuirá el coste que deben pagar los madrileños", afirmó Botella.
RECORTES GENERALIZADOS
También limpieza y zonas verdes sufrirán un recorte del 15 por ciento, lo que obligará a Botella a negociar con todas las empresas concesionarias para encontrar las fórmulas que hagan posible este ajuste.
De hecho, las reuniones entre la delegada, el concejal de cada distrito y los empresarios comenzarán esta misma tarde y deberán fructificar en nuevos contratos para el 15 de julio, ya que la intención del Ejecutivo local es que entren en vigor el 1 de agosto.
Aunque la delegada tiene algunas ideas sobre por dónde podrían ir los cambios, el objetivo principal en todas las negociaciones será "aumentar la eficacia" con la colaboración de las compañías adjudicatarias, que están invitadas a aportar ideas para hacer posible la rebaja sin perjudicar a la calidad de los servicios.
"Hasta ahora hemos tenido unos servicios de sociedad rica: siempre aumentando y muy bien valorados por los madrileños. Ahora ya no somos la capital de un país rico sino de un país que se tiene que empobrecer un 25 por ciento para superar la crisis, y los servicios municipales deben ajustarse a la nueva situación", explicó Botella.
Por ello, pidió a todos "responsabilidad" porque "con independencia de las causas que hayan llevado a esta situación, que todo el mundo conoce, el ajuste es obligado para gestionar el futuro y salir cuanto antes de la crisis".