06/05/2010.- Es el ministro mejor valorado del Gabinete de Zapatero por su lucha contra ETA,pero no faltan, sin embargo, los nubarrones sobre su actuación que proyectan no pocas sombras sobre este veterano político socialista que ha pasado ya por todos los planos del Gobierno y de la Oposición, hasta convertirse en ministro de Interior. El PP le reprocha querer proteger a los culpables del "caso Faisán", mientras los inmigrantes le acusan de persecución policial ilegal.
Los dirigentes de la derecha le achacan querer enterrar el “caso Faisán”, nombre de un restaurante de Irún, propiedad de un presuntos colaborador de Eta, implicado en el cobro del impuesto revolucionario, al que alguien de la policía avisó de que iba a ser detenido en pleno desarrollo de las negociaciones entre Eta y el Gobierno de Zapatero.
El “caso Faisán” ocurrió en la época en que José Antonio Alonso, actual portavoz parlamentario del PSOE, ejercía como ministro de Interior, por lo que Rubalcaba no sabía nada del asunto, pero el PP está empeñado en que ahora ha hecho todo lo posible para salvar a los presuntos afectados.
El “caso Sitel” también ha afectado duramente al ministro Rubalcaba después de que la secretaria general del PP, Dolores de Cospedal, acusara al Gobierno de usar la red de control de las telecomunicaciones Sitel para controlar los teléfonos de los populares.
Otra sombra importante ha sido puesta de relieve por un informe elaborado por magistrados, fiscales y catedráticos de Derecho Penal que cree que los policías que hacen identificaciones indiscriminadas en lugares públicos y detienen a los sin papeles, siguiendo las órdenes que les dan desde el Ministerio del interior, pueden acabar en la cárcel porque supone un trato discriminatorio por motivos raciales o de origen que atenta contra la propia Constitución española.
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