Unas 1.300 personas están "autosecuestradas" en tres cárceles venezolanas

Unas 1.300 personas permanecen "autosecuestradas" en tres cárceles venezolanas en apoyo a las demandas de los reos de mejoras en las condiciones de reclusión y de cese del retardo procesal, informaron hoy medios locales.

Al llamado "autosecuestro", desde el pasado 3 de diciembre, de unas 800 personas en la cárcel de Yare, aledaña a Caracas, se sumaron ayer unos 443 familiares de presos de la prisión El Rodeo y otros 70 del Retén Judicial de El Junquito.

En la cárcel de El Rodeo unas 383 mujeres y 60 hombres decidieron quedarse de manera supuestamente voluntaria en el lugar una vez finalizada la visita dominical, informó este lunes el diario El Nacional de Caracas.

Asimismo, unas 40 mujeres y 30 niños se "autosecuestraron" también ayer en el Retén Judicial de El Junquito, precisó el rotativo caraqueño Últimas Noticias.

Portavoces de los familiares de los presos afirmaron a los medios locales que se solidarizaban con la protesta que desde hace nueve días se desarrolla en Yare.

Los presos de esa cárcel y unos 800 parientes suyos se "autosecuestraron" en exigencia de la renuncia del director del penal, lo que ya habría ocurrido, según datos oficiosos.

También en demanda de mejoras en las condiciones de reclusión, y del cese del retardo procesal y de los supuesto maltratos de los custodios de la Guardia Nacional (GN-policía militarizada).

En principio, las personas retenidas en Yare sumaban 842, de ellas 492 mujeres, 346 niños y cuatro hombres, según datos de la Fiscalía.

El pasado viernes salieron 20 mujeres y 20 niños, tras negociaciones entre los reos, sus familiares, y las autoridades judiciales y de la Defensoría del Pueblo.

Los llamados "autosecuestros" de familiares de presos en apoyo a exigencias de éstos se han vuelto frecuentes en Venezuela, donde a principios de marzo pasado se registró una situación coordinada y simultánea en este mismo sentido en 11 cárceles del país.

El sistema penitenciario de Venezuela, considerado uno de los más violentos de la región, está conformado por 29 penales y 16 internados penitenciarios, que albergan a unos 20.000 reclusos, según datos oficiales.