La presidenta regional pide a Zapatero trato igualitario en la financiación autonómica
13/07/2009.- Critica que al repartir la financiación entre las autonomías se utilicen parámetros como la franja de edad de la población o el bilingüismo
jueves 02 de octubre de 2014, 12:47h
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha advertido hoy al Gobierno de que "no se puede tratar a unos mejor que a otros" a la hora de distribuir la financiación porque el dinero que se reparte lo pone el contribuyente y no "el bolsillo generoso de Rodríguez Zapatero".
Tras colocar la primera piedra de un centro de salud en la localidad madrileña de Alcobendas, Aguirre ha rechazado el modelo de financiación autonómica que ayer le entregó el Gobierno, al considerar que se basa en datos de población de 2007 y, por tanto, que omite a 300.000 madrileños.
Así mismo, ha criticado que al repartir la financiación entre las autonomías se utilicen parámetros como la franja de edad de la población o el bilingüismo, y ha dicho que si esto es así, "que nos financien también nuestra parte, porque Madrid también es bilingüe español-inglés" en la enseñanza pública.
En este sentido ha advertido de que a la Comunidad de Madrid le cuesta "mucho dinero" enviar a los profesores de los colegios públicos -y desde el próximo curso, también de los institutos- a la "inmersión lingüística" en países anglosajones y ha exigido que también se valore esta circunstancia.
La presidenta regional ha demandado al Gobierno un trato igualitario para todas las comunidades y ha advertido de que "no es momento de particularismos o de localismos" sino de tratar a Madrid como a todos, ya que "nosotros tenemos los mismos derechos y no somos de peor condición".
Ha recordado además que la financiación es algo "muy serio" porque con ella las comunidades sufragan el coste de "servicios públicos esenciales" para los ciudadanos como la sanidad, la educación o los servicios sociales y porque "el Estado somos todos" y "la mayor cantidad de recursos" del Estado los aporta "el contribuyente".
Aguirre ha precisado que a la Comunidad de Madrid "le parece bien" que el Gobierno tenga en cuenta parámetros de insularidad o dispersión geográfica para favorecer más a ciertas autonomías, pero ha añadido que "lo que no nos parece bien" es que el presidente le garantizara en enero que contabilizaría a 6,4 millones de madrileños censados por el INE, y ahora, en el nuevo modelo de financiación, "nos quite 300.000".
Este hecho, ha asegurado, unido al parámetro de la "franja de edad", que "deja sin contabilizar" otros 600.000 madrileños hace que 900.000 ciudadanos queden fuera de la financiación sanitaria, a pesar de que tienen "los mismos derechos que todos".
La presidenta ha insistido en que Madrid "es una comunidad solidaria y lo va a seguir siendo" y por eso no va a aceptar un modelo en el que, pese a reconocer la población, disminuya la financiación per cápita, porque sería hacer "un mal negocio".
Por eso, ha exigido que la población madrileña "se financie, al menos, igual que como estaba".
Por su parte, el alcalde de Alcobendas, Ignacio García de Vinuesa, también se ha referido a este asunto que según ha dicho, le ha dejado "absolutamente perplejo" pues "nadie sabe por qué se están comprando apoyos en el Congreso a través de la financiación sin explicarlo a quien se sabe que habitualmente no va a dar su apoyo".
García de Vinuesa ha criticado además que "sigamos sin hablar de financiación local" y que los ayuntamientos se vean obligados a "buscar fórmulas muy singulares" como el Plan E para poder pagar las inversiones necesarias en sus municipios.