El presidente del Gobierno ha planteado acortar los plazos proesales de investigación
La líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha advertido de que la posible reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LeCrim), opción que abrió el presidente Pedro Sánchez para tratar de convencer a Junts para apoyar la Ley de Amnistía, "no va en la dirección correcta" por la afectación general que podría implicar al reducir los tiempos de instrucción
"Sin conocer la propuesta que se está negociando, por la información que tenemos, por eso muestro prudencia, parece que no va en la dirección correcta", ha desgranado Díaz a los medios de comunicación en los pasillos del Congreso tras ser cuestionada por la reforma de la LeCrim y marcando distancias sobre la vía marcada por Sánchez si acorta los plazos procesales de investigación
Sobre si ha conversado con el Jefe del Ejecutivo para trasladarle su parecer sobre ese cambio legal, Díaz ha detallado que ha realizado recientemente varios viajes institucionales, como su visita al Papa Francisco, y que no ha tenido tiempo de hablar con Sánchez pero lo hará "por supuesto".
La también vicepresidenta segunda ha ahondado en sus cautelas sobre los posibles cambios en la Ley de Enjuiciamiento Criminal, dado que hay procesos de reforma que requieren "prudencia", "vigías" y acometerlos con "toda solvencia". "Hay procesos que son muy complejos", ha insistido para remarcar que en derecho es importante conocer las propuestas.
GIRO EN SUMAR
De esta forma, Sumar acomete un giro en su valoración sobre la posible reforma de la LeCrim, dado que el lunes el portavoz de la formación y ministro de Cultura, Ernest Urtasun, dio la bienvenida a estudiar y valorar la opción lanzada por el presidente.
Ayer, el portavoz en el Congreso, Íñigo Errejón, y la portavoz adjunta y dirigente de En Comú Podem, Aina Vidal, ya expusieron que cualquier cambio de la LeCrim debe hacerse con "equilibrio" de cara a mantener garantías y tiempos suficientes de instrucción, sin que tampoco se alargaran por razones no jurídicas las investigaciones judiciales.
También fuentes de la coalición indicaron que la Ley de Amnistía es "sólida" en su actual redacción y su afán es lograr que salga adelante, pero también expresaban escepticismo en relación a los efectos que podría tener corregir la LeCrim. Es más, la sensación es que este asunto empieza a agotar a la ciudadanía y que prolongar más el debate quita margen para incidir en las propuestas sociales, donde quieren poner el foco. Errejón.
Por otro lado, sectores de Sumar incidieron en que todos los grupos parlamentarios que apoyan la amnistía están implicados en las conversaciones, pero llaman a evitar que las negociaciones acaben dando la sensación en la opinión pública que se focaliza en un choque entre PSOE y los postconvergentes.
El lunes Urtasun, y también Errejón, indicaron que con la amnistía van a tener una actitud "flexible", de "tender puentes" y de facilitar el consenso en torno a la Ley. Eso sí, Urtasun alertó de que la amnistía no puede derivar en un "pulso" entre Junts y PSOE.